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Mostrando entradas de 2009

Nada es insignificante_III

A la mañana siguiente, Alex se encontraba de pie, paralizado frente al salón, con los ojos y la boca en una mueca de incertidumbre. La irritación le iba haciendo cosquillas en el cogote y las cejas se le fruncían. Cogía aire y en su garganta aparecía un nombre: —¡Anaaaaaaaaaa!— gritó con furia—¡Qué es todo esto! Ana salió rápidamente del trastero: —¿Qué pasa qué pasa? —¡Qué es todo este desorden! —Nada Alex, estaba haciendo sitio... —¿Sitio para qué?¿No ves cómo lo has puesto todo? El salón estaba lleno de cajas y trastos. Un completo desorden para Alex, una traición a todos esos objetos que los sentía clamarle que los devolviera a su sitio. A Ana en el fondo le hacía gracia la excentricidad de su hermano. Alex no podía hacer una cosa con ella sin que se irritase. Para él Ana todo lo hacía mal, todo lo ponía descolocado. Todo era un desastre. El lunes volvió al trabajo. Ese día se levantó dando un pisotón al suelo con el pie derecho, salió de su casa dando otro pisotón y

Nada es insignificante_II

Una tarde al salir del trabajo, el cielo amenazaba lluvia. Viendo que se mojaría esperó al autobús. El paraguas era un objeto que cuando se lleva encima no llueve, incluso sale el sol, y cuando no se lleva encima cae el chaparrón como el que le estaba cayendo a Alex en ese momento. La parada no tenía marquesina y el techado más próximo estaba lo suficientemente lejos para cuando llegara el autobús y no parase al ver a alguien detrás corriendo. Decididamente, se quedaría hecho una sopa. Para más inri, llevaba clavado cuarenta y cinco minutos. A la hora y media, resolvió volver andando, total, un resfriado tocaba como mínimo. A los quinientos metros una ola lo cubrió entero, el “maldito autobús” acababa de pasar y para más mofa había hecho otra de las suyas. Alex se empezaba a preocupar, pensando qué había hecho mal para que no tuviera un poquito de suerte. Se santiguó dos veces lentamente y apretó el paso Al día siguiente relucía un sol asfixiante y en la mano de Alex brotó un hermoso

Nada es insignificante_ I parte

Nada es insignificante, esta era la constante premisa en la vida de Alex. Era un chico un tanto maniático a los ojos de los demás, pero que bajo esta apariencia excéntrica albergaba un terror respetuoso, un temor hacia los objetos que le rodeaban, ya podían ser de lo más cotidiano que, para él, escondían una fuerza secreta capaz de cambiar la suerte de quienes quisieran. Aún así, Alex llevaba una vida aparentemente normal. Él pensaba que si respetaba a los objetos con los que convivía, estos a su vez no le originarían ninguna desgracia. Es por esto, que sus días eran todo lo ceremoniosos que Alex consideraba necesario, a no ser que alguna fuerza oculta le hiciese cambiar algo para que todo siguiera un curso tranquilo. Comenzaba su día bien temprano, se aseaba, desayunaba, se vestía, mientras esperaba que la cama se enfriara y aireara, era lo último que hacía. Luego salía hacia el trabajo, se dirigía hacia la parada del autobús, si a las y veintidós no aparecía, eso quería decir qu

René Aubry

Sentiros humanos... http://www.youtube.com/watch?v=n99lYsMl8Ns

[...]

La imaginación es sólo el simulacro de un albor que estuvo a punto de ser pero que el pensamiento mató. (A ver, ¿cómo os tomais esto?)

Lienzos rotos

La mujer que había dentro de mí, me miraba en el espejo, escudriñando quizás el porqué de mi actitud. Aquel asunto le pareció mal llevado por mi parte, pero el impulso de mis sentimientos me pudieron. No pude evitar escupir toda mi bilis, una bilis acumulada durante años, me sentía obligada a ser marioneta que imitaba a los demás. Me miró en el espejo con ojos lastimeros, en el fondo me hacía comprender que sólo yo podía solucionarlo. Una sonrisa trémula se dibujó en mis labios y una nueva esperanza brotó en mis manos. Estaba convencida de que lo conseguiría.

(sin título)

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(Sin título)

El tiempo se paró en una fecha y hora, en definitiva en unos números determinados. Esto no significa nada. A partir de entonces, nada existe, nada se crea, nada cuenta. La destrucción es lo único que se autoconfiere. El pensamiento es lo que transgrede a través de ese caos destructivo, más allá de las palabras y del aliento. Asi que toda materia se transforma, esta galimatía comienza a nomar creándose de nuevo.

las cosas más pequeñas se pierden fácilmente en falsos bolsillos

Un toque, un escarmiento, una sacudida, un calambre, una punzada, un cosquilleo, un temblor que espanta, atemoriza, dispersa la sangre en las sienes concentrada, abre los ojos de golpe y mira al frente, porque ya lo de atrás se desvanece en el presente. Respira... profundamente, relajando los músculos tensos, los huesos tiesos, los nervios erizados. Respira... y piensa de nuevo, disfruta de los nuevos pensamientos, de las nuevas esperanzas, de lo nuevo que vendrá.

miscelánea

Miscelánea de cosas varias es lo que se palpa en el ambiente. El principio de un fin, como se suele decir. Un adiós de lágrimas contenidas, un hola de caras desconocidas. Sonrisas que quedan atrás y las que quedan por venir. Gente que fue por la que será. Un despertar con una nueva conciencia aturdida, llena de emoción y de miedo, de intención y fuerza, pero asustada, por los nuevos tiempos que vienen y por los que son para el recuerdo. Inevitable a la par que imparable...

Personas

Porque hay personas básicas y esenciales en la vida, personas que son parte de los cimientos del día a día. Personas que sin ellas no es posible una alegría completa. Son la sonrisa asegurada, la corazonada fuerte. Personas que le dan gran parte del sentido a las cosas, que sin ellas no habría decisión completa para la mayoría de las acciones. Son personas a las que cada día habría que darles las gracias por existir, por todo lo que aportan sólo con su presencia.

ermitañus sentimentae

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de palabras marchitas de sueños encastrados de amores engarzados de imaginaciones desgastadas de risas dehojadas desollando los sueños una y otra vez contra la realidad sin vislumbrar nada más que la fantasía.

caperucita ancianita

Los años no pasan en balde y si no que se lo digan a Caperucita. El camino a casa de su abuela, ahora la de su madre, era ya largo y tedioso para sus huesos. El caso es que la abuela, tras continuos ataques por parte del lobo, se hartó y resolvió irse lejos, muy lejos. Entonces la madre de Caperucita, para no dejar aquella hermosa casa a merced del tiempo, decidió irse a vivir allí y ya por fin dejar independencia a Caperucita. Pero la rutina continuaba y varios días a la semana tenía que ir a ayudar a su madre, que también estaba ya muy anciana. Aquel lugar seguía igual que siempre, el bosque tendría otros tantos años más pero se cuidaba muy bien. Aquel era un día especialmente caluroso de principios primavera, Caperucita iba como podía por el tortuoso largo y trabajoso camino de siempre. El silencio era sobrecogedor, pero Caperucita ya estaba acostumbrada. Al llegar a casa de la madre, notó que estaba demasiado silenciosa, ni siquiera oyó la voz de su madre; quizás estuviera dormid

cuestión de tiempo...

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Quimera, ser doloroso e incomprendido, lleno de esperanza e ilusión, de fantasía. Quimera, quisiera yo darte la vida que otros se llevan consigo a sus sueños. Quimera, pobre Quimera, sólo quiero entenderte y vivirte. Quimera, quiero quererte como imagino que te querría. Pero Quimera, me dejas con los pies en el suelo, sobre mi pesada realidad. Sueño con tu libertad y tú siempre te quedarás adormecida en la mía. Ay, Quimera, cómo quisiera yo poder quererte como me haces creer que te querría. Y sin embargo, al final, acabaré contigo en la almohada. Cuestión de tiempo...

un sólo instante

Un recuerdo, del que ya no recuerdo el olor, ni el sabor, ni la hora, ni el lugar, ni las palabras, ni los gestos... Me ha dado por añorar tu mirada en aquel instante y el deseo de sentirte cerca. Deduzco, después de todo, que te llegué a querer pero no quise apreciarlo, no quise confiar en los desaires en los que me envolvías, no quise soportar ser tu princesa rota. Decido, a pesar de todo, acarrearte el pesar que supuso esa monotonía, y sólo quedarme, por un instante, contigo en un recuerdo.

moscas carnívoras

Es un mediodía prematuro de primavera. El sol calienta la piel, una piel bajo la que corre la sangre espesa llevando sentidos aletargados, adormecidos por el silencio de las voces; algunos escondidos supuran la bilis que rompe costra a costra hasta nunca llegar a sanar. Otros pasan desapercibidos. Sentido es lo que falta a veces en las palabras que construyen un momento, una esencia para un recuerdo. A veces las palabras mueren sin ser oídas, otras los pensamientos no nacen al ser abortados por prejuicios infundados. ¿Y a quién le importa eso? Dejamos que el sentido se coagule, que la piel no se mueva y nos atoramos de credenciales calamitosas. Nos bufamos de los sueños en pos de verdades impropias. Y luego lloramos por todo aquello que deseamos y por todas las vicisitudes que nos abaten una y otra vez. Por todo en lo que confiamos, por aquello que no queremos querer. Nos petrificamos, nos odiamos, nos dejamos que las moscas nos devoren cuando ya no nos queden ilusiones. Y entonces, se

guiri shadow

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abril

Comenzaba, con un todo aquello que calla sufre, se pudre y mis oídos se entaponan de deseos. Poco más o menos la imaginación complementa la realidad como vitamina D, intentando en instancias llegar a surtir efecto o en su defecto causar una sobredosis. Continuaba, con algo mejor, mejor que las palabras, todo lo que conforma un gesto y una mirada. Rumor. Hablan de rumores que trae el viento, de vientos cuentistas que cuentan con la voz de tu interior. Finalizaba, con un final sin fin, solo pausado por una lustrosa noche de sueños imperecederos, de recuerdos incansables, de risas inagotables, de cariños infinitos, de perspectivas en el futuro que acabarán por llegar. divina

DUb

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en las nubes

Salí de casa con lágrimas escondidas. El ambiente me embriagaba de recuerdos mutilados: un olor dulce que me traía vagamente la presencia de un ser ya ausente; una cara desconocida que me era familiar y se me antojaba amigable; un blanco y negro de buen apetito, de impresiones falsas y estúpidas. Era un día de ilusiones cojas, un día falto de esperanza, un día de olvidos manidos, un día de miradas vacías, un día de sonrisas huecas. Un día de imaginación desgastada. No pude evitar sin embargo, que las lágrimas brotaran y en tus brazos murieran; mi pesar rompió en tu hombro y mi cariño manó por el cuerpo. Las palabras hilvanaron los latidos compungidos de un corazón quebrado. Ojalá y que fuese una pequeña pesadilla real, que respiraba el mismo aire y se alimentaba de mis miedos descubiertos. Por un momento, por unos instantes, nada más. La sangre se calmaba en el transcurso del camino. Afloraban los buenos momentos, las miradas huidizas, llenas de intención y misterio, las risa

in crescendo

Se puede apreciar el leve humear de la taza caliente, sobre la luz tenue que invita por fin al descanso. Los días se hacen duros, tanto como no cabe imaginar... pero curiosamente, si se analizan fríamente, comienzan a reblandecerse. La dureza se convierte en experiencia, una experiencia que quizás nunca escarmiente, pero que aún así "no ocupa lugar". Hace tiempo, que la desesperanza y sus similares dejaron de cavar hondo en el día a día y es un descanso. Siento que colmo la necesidad de sanear los principios, los prejuicios, los pensamientos, los sentimientos... in crescendo . Se evapora al contacto con el nuevo aire, se libera, ese algo que permite evolucionar, crecer. Los días preñados de dudas y angustias se reblanceden, con la risa y la gracia, la alegría intrínseca en palabras cotidianas; la tranquilidad de un corazón no sobresaltado por el silencio de sus voces. Ahora escucha.

buen provecho!

Se atisba, se ve venir y de pronto llega, ese detalle que hace diferente un día, que hace sonreír a gusto, que llena de ilusión un día... dos o tres y todos los venideros. Algo diferente, nunca antes hecho, por minúsculo que parezca, algo que sobresale... algo para recordar. No te doy las gracias, porque no te las vas a comer igual que hice yo.

agua

Necesito el sonido del agua, necesito que me envuelva el cuerpo y no deje que el aire me toque, sólo el necesario para trascender por mis pulmones. Necesito desentumecer mis pensamientos, llegar al silencio y escuchar el latido de un corazón que me oprime el pecho, rebosando ilusiones falsas. Necesito sumergirme en las medianas profundidades donde la luz se atenúa; eso será suficiente. Necesito reencontrarme, deshaciendo de nuevo los coágulos de dudas que atoran mi cuerpo. Necesito un momento de ausencia ahogado para comprobar que sigo viva.

trastiempo

A trastiempo. Ver pasar las líneas discontinuas, que nunca acaban, que recorren el asfalto perdiéndose de la vista, allá en la oscuridad en la que se está constantemente entrando y fuera de ella. Ver pasar el cielo intransitable, sobre el que nunca se caminará, estático sobre los ojos. Ver pasar las miradas que se buscaron, no se encontraron, pero se amaron en un segundo. Ver las pulsaciones pulsar un pecho frío, bombeando sin cesar la sangre tibia. Ver el sueño expulsado de las bocas, anhelando realidades de aire. Ver, sin moverse del sitio, sin estar en el mismo sitio; sentir el cuerpo morir y verlo muerto; ver la gente y el tiempo y las cosas pasar; ver... a trastiempo, una realidad ya ida, que fue vivida en los aledaños de un recuerdo.

quién sabe

"Mi respuesta a tu petición es sí." Mientras elefantes rosas danzaban en la oscuridad de la habitación y un gran ventanal dejaba ver un inquietante cielo gris a punto de estallar. Pero mi respuesta es sí.

Qué es esto

Qué es esto... qué... agacho la cabeza y me veo incompleta. Parezco un puzzle con piezas perdidas, algunas son prestadas y las acojo intentando hacerlas mías. En vano. La imaginación se inventa las suyas propias y juega con mi cuerpo como si trampantojo fuera. Pero ese hueco... es una pieza difícil de encajar, que la busco a escondidas, cuestionando por doquier lo que alrededor gira. Un puzzle ... se irá desmoronando en el tiempo, imparable , sin encontrar la principal con la que al fin se sujetaran todas. En vano. Relleno el hueco con meras mentiras, qué ilusa, qué fantasiosa... sigo, con la duda remendando las heridas y con la falsa corazonada de que encontraré la ansiada pieza.

caperucito rojo

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confianza, extraña palabra

Qué significa confiar, qué implica... Qué es lo que nos empuja ciegamente a dejarnos llevar por el otro, porqué arriesgarnos, cuál es el precio de lo que ponemos en juego. Porqué la confianza nos hace estar tan seguros de que no nos implicamos en una mentira. Quién es realmente el otro, en el que confiamos... A veces, la duda me da miedo. Me produce miedo el distorsionar la imagen adjunta de la persona en quien confío, una imagen interpretada después de todo. Quizás ese riesgo sea el conocer realmente o verdaderamente, una verdad que puede hacerte ganar o perder de una tacada. Siempre arriesgando un poquito más, para bien o para mal, pero siempre confiando.

ABSURDA/O

(lat. absurdum ). Contrario a la razón: argumento absurdo. 2 . FILOS . Se dice de toda idea que contiene una contradicción interna. 3 . FILOS . Según los existencialistas, dícese de la condición del hombre caracterizada por la ausencia de sentido de su existencia y del universo. 4 . Dicho o hecho repugnante a la razón: contestar con un absurdo. 5 . Corriente del pensamiento que traduce una toma de conciencia, a menudo dramática, de la irracionalidad del mundo y del destino de la humanidad. Razonamiento ab absurdo , o por lo absurdo , razonamiento que justifica una proposición demostrando que su negación conduce a una contradicción.

s/t

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días aprotéicos

Quizás me haya inventado la palabra. El día giraba en torno a Proteo y se me quedó grabada su característica: ...que cambia de forma a voluntad . Los días pasan sin cambiar a voluntad, las cosas suceden sin nuestra voluntad, los caracteres cambian sin cesar, a no voluntad. Se me antojó entonces inventarme un término así, que expresara su contrario... que no es sano desear lo mismo y su contrario . Todo lo que puedan abarcar las palabras no lo puede hacer la mente. Resumiendo, días aprotéicos, esos días en los que te dejas llevar a voluntad de lo que sea.